No sé dónde tendría la cabeza la primera vez que intenté ver Band of Brothers (Hermanos de sangre). Lo cierto es que después del primer episodio no seguí con ella por parecerme demasiado “patriotera”. Ahora que la he visto hasta el final (con un nudo en la garganta y el corazón a mil en casi todos los episodios) puedo decir que se encuentra entre las mejores miniseries que he visto nunca, aunque es cierto que los acontecimientos se presentan haciendo mayor hincapié en el talante heroico de los hombres que en la crítica a la guerra, a diferencia de otras series bélicas como Generation Kill, donde David Simon relata de una forma más cruda y verídica la sordidez y estupidez de los altos cargos, y el sinsentido de la lucha.
A pesar de que mi ideología me posiciona más cerca de Generation Kill o de películas como Senderos de Gloria (Paths of Glory), de Stanley Kubrick, o Vencedores y vencidos: el juicio de Nuremberg, de Stanley Kramer, no puedo dejar de reconocer que Band of Brothers es un derroche de talento narrativo y visual, con una fuerza en las imágenes capaz de cortarnos la respiración, que aúna la capacidad de trasladarnos a lo más cruento de la batalla y, al mismo tiempo, emocionarnos por la estética de sus planos, secuencias, dirección y banda sonora. (Atención, Spoilers)
Si bien es cierto que está escrita desde una perspectiva claramente definida —no hay un atisbo de crítica hacia el comportamiento de las tropas aliadas—, la historia no es del todo maniquea, y logra plasmar los claroscuros del conflicto: el sufrimiento de los soldados al ver morir a sus compañeros, el miedo en las trincheras, el caos de la artillería explotando alrededor en medio del bosque, la brutalidad del combate, el frío y el hambre; pero sobre todo refleja el coraje de unos hombres que se alistaron para ir a primera línea del frente, y que no se rindieron frente a las terribles adversidades.
Aunque la serie empieza de una manera más convencional, con el entrenamiento de la compañía Easy de paracaidistas y las desavenencias con el capitán Herbert Sobel (magnífico David Schwimmer), con la partida de las tropas hacia Normandía la serie despliega sus alas en un alarde estético y técnico, mostrando en lo que se va a convertir: una historia profundamente visual, que enseña a través del poder de su narrativa la visión de los ganadores de la segunda guerra mundial, y que se centra no es un solo hombre, sino en el conjunto. Esos hermanos de sangre que lucharon codo con codo y que son los verdaderos protagonistas de la historia.
[embedyt] http://www.youtube.com/watch?v=1wlYPlwjGOY[/embedyt]
A pesar de ser una serie coral, los productores (entre los que se cuentan Steven Spielberg, Tom Hanks y Stephen Ambrose, autor del libro en el que se basa la serie) tuvieron la inteligencia de integrar episodios donde quedaron reflejadas las diferentes experiencias de los combatientes, logrando una gran profundidad y riqueza de significado. En este sentido es admirable el episodio Bagstone (E06), que presenta el día a día del soldado Eugene Roe, uno de los médicos de la compañía Easy. Además de la dureza de su trabajo y el progresivo desgaste emocional, el episodio ahonda en sus sentimientos, con algunas escenas inolvidables como su relación con la enfermera, que evidencia la fragilidad de la vida en la guerra pero, también, la posibilidad de la esperanza, la humanidad y el amor.
Otro episodio impactante es Carentan (E03) y la historia del soldado Albert Blithe, cuyo miedo a la muerte y el estupor de ver caer a sus compañeros en combate solo se contrarresta cuando interioriza la premisa de que, para enfrentar con valentía la lucha, debe asumir que ya está muerto. En este episodio destaca la interpretación de Marc Warren (Mad Dogs, Jonathan Strange & Mr Norrell, State of Play), cuyo trabajo actoral logra hacernos sentir el terrible dilema que supone morir o ser considerado un cobarde.
Una visión subjetiva de la realidad
Como ya he comentado, Band of Brothers está basada en el libro homónimo del historiador y biógrafo Stephen E. Ambrose, que recoge las entrevistas a los veteranos de la Easy Company donde se narran las distintas experiencias. El realismo de la historia (aunque los puntos de vista siempre son subjetivos), en la serie se ve reforzado mediante la incorporación de fragmentos de estos encuentros con los verdaderos protagonistas al inicio de cada episodio, cuyos nombres son revelados en Points, el capítulo final.
Las reflexiones de estos hombres —que eran casi niños en la guerra—, y el papel que jugaron en ella son intensamente emotivas, y nos hacen pensar sobre conceptos como “el enemigo” (muchachos como ellos que lucharon porque creían que era su deber) o quiénes fueron los héroes. No obstante, la visión sigue siendo profundamente patriótica, y el verdadero coronel Winters lo deja claro en su alegato final: los verdaderos héroes no fueron los supervivientes, sino los que cayeron allí y derramaron su sangre por la libertad.
De hecho, el teniente Winters (fantástico Damian Lewis), a pesar de su carisma, en la serie es un personaje sin grises morales del que solo se muestra su integridad y magnanimidad con los hombres bajo su cargo. Algo que no ocurre con el personaje del capitán Lewis Nixon (Ron Livingstone), que se convierte en el contrapunto de Winters, y del que sí se percibe su faceta más oscura con la tendencia a la bebida, las dudas sobre el sentido de la guerra e, incluso, con la desesperación al ser abandonado por su mujer.
Si no estaba suficientemente clara la misión casi sagrada de luchar en la guerra, el noveno episodio, Why We Fight, deja el objetivo diáfano mostrando el horror de los campos de concentración y el propio desconcierto de los soldados y mandos, que desconocían su existencia (era un secreto de Estado alemán). Esto no quita que el episodio sea profundamente emotivo y una de las cúspides de la serie, y la liberación de los prisioneros y la limpieza de los cadáveres (que recae en las gentes del pueblo cercano, cómplices necesarios) escenas de las que no se olvidan fácilmente.
La serie obtuvo una veintena de nominaciones a los premios Emmy y ganó siete, entre los que figura el galardón a la mejor miniserie, que también se llevó en los Golden Globes. Dos días después de su estreno, el nueve de septiembre de 2001, se produjeron los atentados del 11-S.
Nota en Mis Puntuaciones
Ficha técnica
Título original: Band of Brothers
Género: Drama, bélico
Basada en la novela homónima de Stephen E. Ambrose
Productores ejecutivos: Steven Spielberg, Tom Hanks
Cadena: HBO
Año de creación: 2001
Episodios: 10
Mi novela ‘Araneida, la fortaleza de los deseos’ es una historia de dark fantasy, con elementos de ciencia ficción y terror, que rinde homenaje a autores como Neil Gaiman, Stephen King y Edgar Allan Poe. Viajes en el tiempo, referencias literarias y cinematográficas, guiños a cuentos clásicos y magia se combinan en una narración que habla sobre cómo nuestros anhelos pueden transformarse en obsesiones.
Una maravilla por la que pasaron grandes !
14 septiembre 2016 | 14:12
Un reparto excelente, donde hay muchísimas caras conocidas empezando por los protagonistas Damian Lewis y Ron Livingstone 🙂
14 septiembre 2016 | 14:20
Pues lo que muchos te habíamos comentado por Twitter: una absoluta joya. Es «Salvar al Soldado Ryan» (muy) corregida y (muy) aumentada. Ahora descansa un poco y vuelve al frente en un tiempo a por «The Pacific». Aunque, a mi modo de ver, no está al mismo nivel (el punto de vista es distinto y cuesta algo más empatizar con los protagonistas, que además no forman un grupo tan cerrado como en «Band of Brothers»), vale mucho la pena y es una buena «Companion Piece». Ya nos contarás.
14 septiembre 2016 | 14:46
Es buenísima,
14 septiembre 2016 | 15:12
Tremenda
14 septiembre 2016 | 15:28
Me alegro de que por fin hayas podido disfrutar de esta maravilla de la television, un hito de la HBO y el referente a partir de entonces para cualquier proyecto bélico llevado a la pequeña pantalla. Desde la estructura narrativa, pasando de su entrenamiento con la moral y la ingenuidad de los soldados bien alta, hasta la llegada al Nido del Aguila y pasando por los campos de concentracion, con del desgaste fisico y psicologico de los soldados. Es cierto que se le puede acusar de excesivamente patriótica, pero aun asi es un mangifico reflejo de cómo era la guerra entonces, cómo fue la II Guerra Mundial para muchos jovenes que lucharon en ella, y lo que significó para ellos, para sus familiares y amigos.
Creo que aun asi su mensaje antibelicista es evidente, recogiendo ese tono que ya tenia Salvar al Soldado Ryan, de mostrar la guerra en su crudeza y haciendo hincapie en su epicidad o heroicidad de los soldados, a la vez que se muestra el sinsentido de la guerra, de los enfrentamientos, de la fria e inhumana cadena de mando (La Ultima Patrulla es un capitulazo que muestra muy bien ésto), y sobre todo en Por qué luchamos, el recordatorio de hasta donde puede llegar el ser humano a la hora de inflingir daño a otros simplemetne por su diferencia de raza, de ideología…o por cumplir órdenes de un superior.
Poco más hay que añadir a tu magnífico análisis. Quizás me hubiera gustado que hicieras referencia al apartado musical, con una maravillosa partitura de Michael Kamen, que sabe resultar épico y eneérgico cuando la situacion lo requiere, sin dejar de ser intimista y emotivo cuando se trata de acompañar los sentimientos, dramas y dudas de los soldados de la Compañía Easy.
Otro guiño interesante es su título, el original «Band of Brothers» hace referencia a la obra Enrique V de Shakespeare. Recuerdo haber visto el discuro de «We few, que happy few» hace años en la peli de Kenneth Brannagh…Soy un cursi, lo sé.
No me quiero ir sin mencionar Generation Kill, con la que la comparas. Yo también lo hago, pero diferenciando tanto el tono de la produccion como el conflicto al que hacen referencia. Creo que es buscado el tono menos «amable» de GK precisamente porque ese mundo de héroes intachables y malvados ya no existe, y los conflictos bélicos son mas ambiguos, con una moralidad mas dudosa en ambos bandos. GK tiene un discurso parecido a la hora de dejar en evidencia el sinsentido de la guerra (llegaste a ver «Sargento, a que estamos disparando»? Muchos capitulos transmiten esa sensacion de absurdez…) y tambien muestra que los soldados son apenas unas piezas insignificantes en una guerra que cada vez en mas tecnológica. Creo que las dos se pueden complementar, y su mensaje es intachable en cada caso.
Como anécdota, decir que no he visto aun The Pacific, porque quizas la campaña del Pacifico me interesa menos, porque la serie se me antojaba una «copia» de Band of Brothers, o porque la banda sonora la hace el insufrible de Hans Zimmer…No sé. Si te animas y vale la pena no dejes de decirlo a ver si supero mis prejuicios! 😉
«- Abuelo, en la guerra fuiste un héroe?
– No, pero serví en una compañía de héroes.»
14 septiembre 2016 | 16:30
La empece a ver en el 2014 por las recomendaciones de entendidos en el tema, solo vi el primer capitulo y la verdad la deje porque no me engancho la historia.
Por fortuna la retome el año pasado y me pegue un tirón de los 10 capítulos y es una miniserie soberbia en todos sus apartados, quizás sobresale mas en lo visual que en otras cosas pero hay que verla si o si.
PD: La escena de la limpieza del campo de exterminio es uno de los momentos cumbres de la edad dorada de la tv y haría paliedecer de envidia a Spielberg y a cualquier cineasta que haya tratado temas bélicos en el cine.
Un abrazo Cecilia
14 septiembre 2016 | 17:46
Sigo con ella en pendientes :/
14 septiembre 2016 | 19:01
Es muy buena, Almu. Yo de ti la adelantaba en el calendario seriéfilo 🙂
14 septiembre 2016 | 19:06
Te la dejaba to que la tengo en DVD
14 septiembre 2016 | 19:09
Me pondré en breve, habláis todos muy muy bien de ella. De hecho creo que la tengo apuntada desde el «alterverso » por vosotras, Marta
14 septiembre 2016 | 19:11
Así me gusta, las amigas pasándose buenas series ^^
14 septiembre 2016 | 19:12
En mi opinion el sinsentido de la lucha no tiene cabida desde el punto de vista americano porque si tenia sentido la lucha que libraban las democracias contra el fascismo. Antonio apunta que en el capi la ultima patrulla queda reflejado pero no se refiere al hecho de luchar contra el nazismo, sino al hecho de que un oficial mande a los soldados a una mision prescindible con la guerra practicamente terminada para su gloria personal.
Un placer ver que tantos años despues la serie continua reivindicandose
15 septiembre 2016 | 09:39
Maravillosa eh?
15 septiembre 2016 | 13:09
A mi aún me ha gustado más al verla ahora
15 septiembre 2016 | 13:09
Monica Sangrador Muy buena! Es que la has vuelto a ver??
15 septiembre 2016 | 13:57
Todos los veranos rescato una de las que me han gustado mucho, suelo tener como tradición Doctor en Alaska, pero este año ha sido esta
15 septiembre 2016 | 14:40
15 septiembre 2016 | 15:12
Oh, Doctor en Alaska. La de veces que la habré visto. Me encanta
15 septiembre 2016 | 15:12
Es una de mis favoritas, de las que nunca me canso
15 septiembre 2016 | 15:24
Monica Sangrador Same here!
15 septiembre 2016 | 15:30
Hola Oscar, es verdad que no es igual la segunda guerra mundial a la de Irak, y en ese sentido te doy la razón. Lo que sí es cierto es que la serie refleja de una manera parcial la guerra. Las tropas aliadas también cometieron violaciones de derechos humanos (se bombardeó a la población civil, se cometieron violaciones, robos, etc.) y en la serie solo se refleja el aspecto heroico y lo dura que es la batalla. A eso me refería.
Es una gran serie, pero es importante el espíritu crítico y reflexionar sobre lo que estamos viendo. Un saludo y gracias 🙂
20 septiembre 2016 | 08:23
Querido Panfilo, así que te pasó lo mismo que a mí, jeje. Menos mal que al final nos animamos, porque es una gran serie. Estoy contigo en que en el aspecto visual es impresionante, de lo mejor que he visto. De hecho, en muchas ocasiones me pregunté lo que se experimentaría viéndola en pantalla grande. Respecto al guion, como he dicho en el post, tengo mis reservas por el tema del punto de vista de la historia. Por eso no le he puesto un 5. Un abrazo fuerte y gracias por tu fidelidad!
20 septiembre 2016 | 08:26
Hola Antonio! Al fin respondo a tu completísimo e interesante comentario. Estoy de acuerdo en todo lo que dices y, además, te doy las gracias por hacer hincapié en el tema de la música, porque la banda sonora es extraordinaria. Desde el inicio con los títulos de crédito ya tenía el vello como escarpias. Sin embargo, hay una cosa que no comparto: no creo que Band od Brothers sea antibelicista, sino todo lo contrario. Creo que intenta explicar por qué fue tan importante luchar en la segunda guerra mundial contra los nazis y lo heroico del tema. Otra cosa es que se refleje lo dura que es la guerra. En este sentido creo que es diametralmente opuesto el mensaje a Generation Kill, donde sí está claro lo que piensa su creador: que la guerra es un absurdo en manos de idiotas. Creo que esa «ingenuidad», además de proyectar una ideología, remeda las pelis clásicas bélicas de Hollywood, que están narradas desde ese mismo punto de vista. Un beso muy fuerte y muchas gracias por tomarte el tiempo de escribir tan buen comentario.
20 septiembre 2016 | 08:34
Justo eso de no empatizar con los protas es lo que comentaba Alberto Nahum en el post que me pasó por Twitter de The Pacific. Ya sabes que el género bélico no es lo mío, así que creo que descansaré un poco antes de hincarle el diente. Aunque con ciertos «peros» respecto al punto de vista, la verdad es que he disfrutado como una enana viéndola. Un beso!
20 septiembre 2016 | 08:37
Totalmente de acuerdo Cecilia, los americanos, si bien creo que no robaron ni violaron, (eso fueron los rusos) las bombas contra la poblacion civil alemana es un crimen
01 noviembre 2016 | 20:50
Hola Oscar, la verdad es que pensar que en una guerra no se cometen tropelías (vengan del bando que sea) es tener una visión demasiado naïf. En la serie se ve cómo los americanos se llevan todo lo que pueden de las casas de los nazis y estoy bastante convencida de que se hicieron cosas que después serían silenciadas. La serie bastante maniquea en este sentido. Un saludo y gracias por comentar 🙂
05 noviembre 2016 | 18:41